El periodico adelantaba las noticias de mañana en el cual se leían, como es lógico, cosas que tienen todavía que suceder, por eso quiere meterse en cama para no despertarse, para no salir a la calle al día siguiente. Quiere cambiar las noticias, el simple hecho de que salga a la calle conseguirá que no pase lo que debe pasar... aunque lo desee.
Desea que pase lo que leyó con sus propios ojos en la columna central de aquel periódico pero el miedo lo redea e inunda los pensamientos que pasan ajenos a él por su cabeza.
Las sábanas no atraen su sueño, su colchón no recuerda su contorno corporal y su cabeza no consigue descansar a gusto sobre su almohada.
Miedo... miedo a cerrar los ojos y despestarse afrontando la realidad que ya tiene asumida de tiempo atrás, pero no quiere volver a tropezar con piedras del pasado, con piedras que no tienen nada que ver con las que antes lo han tirado al suelo, simplemente lo que desea es que esta vez no aparezca ninguna piedra en su camino, no quiere sentir el dolor tras caerse nuevamente al suelo, por qué piensa que si cae esta vez no se podrá levantar.
No puede dejar de pensar, no es capaz de dejar su cabeza en stand by... no consigue controlarse, no consigue dominar sus impulsos... ni su corazón.
¿Cómo amanecerá el día?
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