No es todo como parece. Parece que todo le va bien, pero un día decide pararse a pensar, cuando ya la desesperación forma parte de su vida. Han sido muchos sus errores, tantos que es muy difícil arreglarlos ahora cuando el camino se le pone todo cuesta arriba. Sin lugar a dudas no se arrepiente de nada, pero se está complicando salir de donde se ha metido. Las esperanzas se esfuman como el humo, pero queda la latente brasa entre la ceniza. Sólo necesita que alguien sople un poco para que vuelva a arder la llama.
jueves, 4 de marzo de 2010
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