Qué bonito oir tu voz aunque sea por teléfono, esa voz dulce que por fin, tras ese encuentro casual de la vida, ya he conocido en persona.
Qué bonito sentir sonreir a mi corazón cuando te siento aunque sea en la distancia, esa distancia que quiero romper, esa distancia que ya un día hemos roto.
Lo más bonito de todo es escuchar tu sonrisa y dejarme conmovido con su dulzura.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)

No hay comentarios:
Publicar un comentario